**¿POR QUÉ IMPORTA?**
Este hecho refleja una grave irresponsabilidad de nuestros representantes. Cuando los diputados no asisten, las leyes urgentes se estancan y se desperdician recursos públicos. Los ciudadanos merecen un Congreso que trabaje, no uno vacío. Esto afecta directamente la confianza en nuestra democracia.
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**SESIÓN PARLAMENTARIA SUSPENDIDA: SOLO 37 DIPUTADOS DIERON LA CARA**
*Santiago.* Una jornada bochornosa se vivió este miércoles en el Congreso: la sesión de la Cámara de Diputados tuvo que suspenderse por falta de quórum. De los 155 legisladores, solo 37 estaban presentes al momento de la votación, muy lejos de los 51 necesarios para comenzar los debates.
El hemiciclo amaneció casi vacío. Pese a los timbres de llamado —que dan 15 minutos de plazo para que los diputados lleguen y marquen asistencia—, la convocatoria no logró reunir el mínimo requerido. José Miguel Castro, presidente de la Cámara Baja, actuó según el protocolo y suspendió la sesión, recordando que situaciones así ya han ocurrido antes, incluso en 2021.
Entre los temas que quedaron pendientes estaban la votación de enmiendas al Convenio de la Organización Marítima Internacional y un proyecto sobre la titularidad de profesores contratados por más de tres años. Ambos asuntos, clave para el desarrollo del país, deberán esperar.
Los diputados ausentes —la gran mayoría— arriesgan multas, pero el daño ya está hecho: la imagen del Congreso se resiente aún más. La ciudadanía espera que sus representantes cumplan con su trabajo, especialmente en momentos donde se discuten leyes que impactan la vida diaria de los chilenos.
Mientras, la sesión podrá reanudarse en un plazo de cuatro horas, siempre que se logre el quórum. Pero la pregunta queda flotando: ¿volverán los diputados a sus puestos, o seguirán ausentes?
