**Valentía y Olvido: La Enfermera que Enfrentó al Sistema y Terminó Abandonada**
**Por Claudia Molina B | FACTOS – Reportaje/Denuncia**
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### **¿Por qué importa?**
Este caso expone cómo el sistema castiga a quienes denuncian irregularidades en la salud pública. Ana Carvallo, enfermera del Hospital de Quellón, alzó la voz contra malas prácticas y hoy enfrenta persecución, despido y una pensión miserable. Su historia refleja un problema mayor: la impunidad frente a la corrupción y el abandono de los funcionarios valientes. Si no se protege a los denunciantes, las malas prácticas seguirán destruyendo la salud pública.
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### **La Noticia**
**Una enfermera valiente, un sistema que la traicionó**
Ana Carvallo Vásquez, enfermera del Hospital de Quellón (Chiloé), denunció en 2020 graves irregularidades: una bodega de insumos clínicos en pésimas condiciones, licitaciones cuestionables y falta de probidad. Su recompensa por hablar? Persecución laboral, sumarios administrativos y, ahora, un despido injusto.
**Denuncias que se volvieron en su contra**
Carvallo trabajaba en esterilización y calidad cuando detectó que insumos médicos (gasas, jeringas, sueros) se almacenaban en un lugar inseguro. Pese a ello, el Servicio de Salud Chiloé renovó el contrato al mismo proveedor. Cuando ella lo denunció, comenzaron los problemas: sumarios, presiones y hasta una investigación en su contra, mientras los responsables seguían en sus cargos.
**Nadie la escuchó**
La agrupación *Sociedad Sin Corruptos Chiloé* envió cartas a la ministra de Salud y otras autoridades, alertando del caso. Pero nada cambió. Mientras, Ana sufría acoso laboral y su salud mental se deterioró. La ACHS le diagnosticó un 40% de invalidez psicológica, pero su pensión no superará los $500 mil. Peor aún: el Servicio de Salud Chiloé la destituyó, pese a que el proceso en su contra estuvo lleno de irregularidades.
**Un trasfondo político incómodo**
Ana es exesposa de Álvaro Bórquez, exfuncionario del mismo hospital y hoy investigado por cohecho y falsificación. Álvaro es hermano del diputado UDI Fernando Bórquez, quien, según denuncias, estaría al tanto de la persecución contra Ana.
**El mensaje claro: callar o sufrir**
Este caso muestra cómo el sistema aplasta a quienes exigen transparencia. Ana Carvallo perdió su trabajo, su salud y casi todo, mientras los responsables siguen impunes. Su historia es un llamado urgente: sin protección real a los denunciantes, la corrupción seguirá ganando.
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*¿Te indigna? Comparte esta historia. El silencio solo beneficia a quienes abusan del poder.*