# Doble estándar en Cancillería: Embajada en Argentina operó con dólar blue y efectivo, pero solo sancionaron a subalternos
## **¿Por qué esto importa?**
Porque muestra cómo el Estado aplica castigos solo a funcionarios de menor rango mientras protege a autoridades. Porque el uso de dólar blue y efectivo sin control abre la puerta a mal uso de plata de todos los chilenos. Y porque quien denunció estas irregularidades hoy sufre hostigamiento, demostrando que en el servicio exterior chileno, hacer lo correcto puede costarte el trabajo.
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## **La noticia**
Un sumario administrativo de Cancillería de cinco tomos –al que tuvo acceso FACTOS– confirma graves irregularidades financieras en la Embajada de Chile en Argentina. El documento detalla pagos a proveedores en dólar blue (mercado informal), retiros masivos de efectivo sin justificación, facturas que no coinciden con los montos pagados y documentos reconstruidos para engañar a auditores.
La Fiscalía de Relaciones Exteriores formuló cargos y sancionó al entonces Encargado de Negocios interino, Alberto Rodríguez Aspillaga, y a funcionarios administrativos. Sin embargo, hay una omisión clave: bajo el período del actual embajador, José Antonio Viera-Gallo –cuando las mismas prácticas continuaron y estallaron las denuncias internas– no hay investigación ni medidas en su contra.
Esto revela un doble estándar: se castiga a los subalternos, pero se deja intocable al embajador titular, pese a que los problemas persistieron durante su gestión. La funcionaria que destapó el caso, Catalina Barceló, enfrentó una campaña de descrédito por parte de Viera-Gallo –quien la habría llamado “loca” y “mitómana”– y su denuncia por Ley Karin (contra el acoso laboral) lleva meses sin respuesta, violando los plazos legales.
El mensaje es claro: en la Cancillería, denunciar irregularidades te puede destruir la carrera, mientras los altos cargos operan con impunidad. El caso ya no es solo sobre malas prácticas financieras, sino sobre la protección política que permite que estas ocurran.
