**POR QUÉ IMPORTA ESTE CASO**
Un diputado podría quedar fuera del Congreso y perder su candidatura al Senado.
Esto refleja cómo se fiscaliza a los políticos acusados de usar mal el dinero público.
La ciudadanía exige transparencia: estos casos marcan si hay consecuencias reales para quienes investigan por corrupción.
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**DIPUTADO CALISTO QUEDA AL DESCUBIERTO: PODRÁ SER FORMALIZADO POR FRAUDE AL FISCO**
La Corte Suprema confirmó el desafuero del diputado Miguel Ángel Calisto, abriendo la puerta para que la Fiscalía lo formalice por presunto fraude al Estado. La votación fue dividida, lo que refleja lo polémico del caso.
Calisto, actual candidato al Senado por Aysén, está acusado de haber firmado contratos de asesoría con su vecina, Carla Graf, sin que existan pruebas de que ella realizó los trabajos. Según la investigación, Graf habría trabajado de manera remota mientras ejercía como profesora en la misma región, lo que hace sospechar que los pagos fueron irregulares.
La Brigada de Delitos Económicos de la PDI y la Unidad Anticorrupción del Ministerio Público llevan meses recopilando antecedentes. Aunque el desafuero ya está firme, el Servicio Electoral aclaró que, por ahora, Calisto puede seguir en la carrera al Senado por la Federación Regionalista Verde Social.
Eso sí, hay un «pero» importante: si resulta electo, no podrá asumir el cargo ni recibir sueldo mientras no se resuelva su situación judicial. La medida busca evitar que alguien con una investigación grave en curso ocupe un escaño en el Congreso.
Este caso reaviva el debate sobre los controles a los parlamentarios y si las leyes son suficientes para sancionar a quienes son investigados por delitos que afectan al erario nacional.